¿Cuál es el centro ceremonial de los toltecas?

La cultura tolteca es una de las más fascinantes de Mesoamérica y ha sido objeto de estudio y admiración durante siglos. Este grupo humano habitó el territorio mexicano entre los siglos X y XII d. C. y se le atribuyen grandes contribuciones en la arquitectura, la religión y el arte. En este artículo nos enfocaremos en una pregunta que ha intrigado tanto a historiadores como a curiosos: ¿Cuál es el centro ceremonial de los toltecas?

Tula, la ciudad sagrada

La ciudad de Tula fue el centro ceremonial más importante de los toltecas. Se encuentra ubicada en el estado de Hidalgo, México. Esta ciudad fue fundada alrededor del siglo VII d. C., siendo inicialmente un asentamiento de influencia teotihuacana. Con el avance de los toltecas, se convirtió en un importante centro ceremonial dedicado a los dioses de esta cultura.

Los centros ceremoniales toltecas eran lugares de tributo y adoración a los dioses. En ellos se llevaban a cabo distintos tipos de ceremonias religiosas y se realizaban sacrificios humanos para proteger las cosechas y mantener la fertilidad. Tula no fue la excepción. Esta ciudad contaba con importantes templos y edificios ceremoniales que la hacían un lugar de gran veneración.

Los templos de Tula

Los templos eran núcleos religiosos conducidos por sacerdotes. Además de contar con funciones gubernamentales y comerciales. En Tula, los dos templos más importantes eran el Templo de Tlahuizcalpantecuhtli y el Templo Tzompantli. Ambos templos formaban parte del complejo ceremonial de la ciudad.

El Templo de Tlahuizcalpantecuhtli es el principal templo de Tula, también conocido como pirámide, con un basamento compuesto de cinco terrazas. Sus paredes presentan una decoración tallada de jaguares, coyotes y águilas engullendo corazones humanos y la efigie del dios Quetzalcóatl. El templo asociado al Dios del Amanecer tiene una altura de 9 metros de alto.

El Templo Tzompantli está ubicado a pocos metros del Templo de Tlahuizcalpantecuhtli en Tula. Es una especie de altar cuya función era colocar cráneos de prisioneros de guerra sacrificados para ejercer un tipo de coerción social en la población.

Chichén Itzá, la influencia tolteca en la cultura maya

La cultura tolteca también tuvo influencia en otras culturas mesoamericanas, como la maya. Uno de los ejemplos más representativos es la ciudad de Chichén Itzá, en la península de Yucatán, México. Aunque esta ciudad fue fundada por los mayas, a partir del siglo X d. C. tuvo una importante influencia tolteca en su construcción y arquitectura.

El Templo de Los Guerreros es el templo más importante de Chichén Itzá. Rodeado del conocido bosque de las mil columnas, su plataforma mide 40 metros y tiene una altura de 24 metros de alto. En su entrada hay una escultura de Chac Mool y en su interior conserva una gran cantidad de salas con bóvedas. Este lugar es un ejemplo de cómo la arquitectura tolteca marcó una transformación en el diseño y construcción de edificios en Mesoamérica.

Chichén Itzá es también conocida por su cenote sagrado o pozo de los sacrificios. Este cenote era utilizado para realizar sacrificios humanos en honor a los dioses. Los sacrificios eran prisioneros de guerra y se creía que eran necesarios para proteger las cosechas y mantener la fertilidad en la región.

La cultura tolteca, maestros constructores

La cultura tolteca es considerada como una de las grandes maestras constructores de Mesoamérica. Sus edificios y templos se caracterizan por ser de enorme tamaño cuadrangular y elevados sobre una plataforma de piedra con escalinatas que llegaban a la parte superior. Contaban con amplias áreas techadas, muchas columnas de piedra talladas con figuras de guerreros o serpientes emplumadas, y con macabras escenas de seres humanos y cráneos.

Además, la magnitud y el esplendor de los centros ceremoniales toltecas les otorgaron a ciudades como Tula, Huacapalco y Chichén Itzá una proyección de veneración a los dioses.

¿Cómo influyó la cultura tolteca en la historia de México?

Los toltecas son una cultura mítica y algunos historiadores sugieren que fue una invención de los aztecas. Sin embargo, la influencia de los toltecas en la historia de México es innegable.

Los tolteca-chichimecas emigraron hacia Culhuacán en el s. IX d. C. y establecieron su asentamiento en Tollan o Tula. Tula se expandió hasta alcanzar aproximadamente 14 km² y una población de entre 30,000 y 40,000 habitantes.

La ciudad de Tula se convirtió en un punto importante dentro de la ruta de la turquesa, y su influencia alcanzó regiones como el Golfo de México, la Costa del Pacífico y el Altiplano Central. Además, la cultura tolteca dejó una huella imborrable en la arquitectura, el arte y la religión de México, y sus descendientes directos, los aztecas, se consideraron a sí mismos como herederos de la cultura tolteca.

Conclusión

En resumen, el centro ceremonial más importante de la cultura tolteca fue la ciudad de Tula, donde se encontraban templos y edificios ceremoniales dedicados a la veneración de los dioses. Sin embargo, la cultura tolteca también tuvo influencia en otras culturas mesoamericanas, como la maya, y dejó una huella imborrable en la historia de México.