¿Qué es el material sensible en Criminalística?

La Criminalística es una rama de la criminología que se encarga del análisis de indicios y evidencias para investigaciones de delitos. Uno de los conceptos más importantes en criminalística es el “material sensible”, el cual se refiere a cualquier objeto, instrumento, marca, rastro, señal, vestigio o huella que tenga relevancia para un hecho delictivo.

La importancia del material sensible en la investigación criminalística

El material sensible es fundamental en la investigación criminalística, ya que permite a los peritos y expertos en la materia determinar diferentes aspectos del delito. Los indicios pueden ser de dos tipos: biológicos y no biológicos. Los primero se refiere a los rastros encontrados en fluidos corporales como sangre, esperma, saliva, entre otros. Los segundos comprenden marcas, huellas y muestras que pueden relacionarse con los objetos que se utilizaron durante el delito.

Características de los indicios sensibles

Existen diferentes tipos de indicios. Las características de clase son aquellas que sin importar el tipo de procedimiento de estudios, sólo se ubican en grupos amplios. Por otro lado, las características identificadoras permiten relacionarlos con un individuo en particular. Los indicios asociativos están estrechamente relacionados con el hecho, mientras que los no asociados no tienen relación con el delito investigado.

Además, los indicios pueden ser determinantes o indeterminantes. Los primeros son aquellos cuya naturaleza física no requiere de un análisis completo de su composición y estructuración para su identificación. Por otro lado, los indicios indeterminantes son aquellos cuya naturaleza física requiere de un análisis completo para conocer su composición y estructura.

Orígenes de la criminalística y su relación con el material sensible

La Criminalística ha evolucionado a lo largo de la historia gracias a diferentes disciplinas que le han dado herramientas para la investigaciones de delitos. La dactiloscopia fue una de las primeras disciplinas precursoras, y la fotografía criminal también ha sido fundamental en la investigación de delitos.

La Medicina Forense surgió en 1575 con Ambrosio Pare y continuada por Paolo Sacchias en 1651. Pero fue hasta 1665 que Marcelo Malpighi fue el primero en observar y estudiar los relieves papilares de las yemas de los dedos y las palmas de las manos.

En 1684 se publicó una de las primeras publicaciones europeas acerca del estudio de las impresiones dactilares, realizado por el Doctor Nehemiah Grew. Johannes Evangelist Purkinje describió los tipos de huellas dactilares de los dedos y las clasificó en nueve grupos principales en 1823.

Allan Pinkerton puso en práctica la fotografía criminal en 1866, lo que posteriormente se llamaría fotografía judicial y actualmente se le conoce como fotografía forense.

Tipos de material sensible

El material sensible puede ser de diferentes tipos. El material biológico es uno de los tipos más comunes, ya que se pueden encontrar restos en fluidos corporales, como sangre, semen, orina, saliva, entre otros. Estos restos pueden ser analizados en laboratorios para determinar la identidad del autor del delito.

El material físico es otro tipo de material sensible. Los objetos encontrados en el lugar del delito pueden proporcionar información importante sobre el delito y el autor. Los objetos pueden ser armas, herramientas, medios de transporte, entre otros.

También es posible encontrar indicios digitales, como correos electrónicos, mensajes de texto, archivos multimedia, entre otros. Los indicios digitales pueden ser de gran utilidad en investigaciones específicas de delitos cibernéticos.

Importancia de analizar el material sensible en la investigación de delitos

La investigación de delitos requiere de la recolección, análisis e interpretación del material sensible. Los expertos en criminalística pueden determinar, a través de los indicios sensibles, la forma en que ocurrió el delito, quién o quiénes lo cometieron, incluso la relación entre la víctima y el autor.

La recolección adecuada del material sensible es fundamental, ya que puede afectar la validez del análisis posterior. Los investigadores deben tener en cuenta muchos factores al momento de recolectar evidencia, como la cadena de custodia, la contaminación, la preservación y el registro detallado del material sensible.

Conclusiones

En conclusión, el material sensible es de gran importancia para la investigación criminalística. Los indicios sensibles hallados en diferentes tipos de evidencia pueden determinar ciertos aspectos del delito, como la forma en que ocurrió, quiénes son los posibles autores, entre otros.

Los investigadores deben recolectar adecuadamente los indicios sensibles para asegurar su validez en la interpretación posterior. La recolección inadecuada puede afectar la investigación y la administración de justicia.

Es necesario continuar la evolución de la Criminalística para mejorar los procedimientos de recolección del material sensible. Investigaciones de delitos plantean importantes desafíos en la actualidad, tales como la recolección de material sensible en delitos cometidos en línea y el análisis de datos digitales.