¿Qué significa ser pacificador según la Biblia?

En un mundo lleno de conflictos, la pacificación parece ser un ideal inalcanzable. La hostilidad y las divisiones están por todos lados y parecen dominar nuestra realidad. Sin embargo, la Biblia nos muestra una visión diferente: la de la paz.

En Mateo 5:9, Jesús habla acerca de los pacificadores, quienes son llamados hijos de Dios. Pero, ¿qué significa ser pacificador según la Biblia? A continuación, exploraremos algunos pasajes bíblicos relevantes y descubriremos lo que la paz realmente significa en el contexto de la Biblia.

El significado de ‘pacificador’ en la Biblia

La palabra “pacificador” se refiere a alguien que busca establecer enlaces con los demás y eliminar la hostilidad. Los pacificadores representan el corazón de Dios para traer paz a un mundo y relaciones rotas. Los pacificadores no son aquellos que eligen vivir en paz sino aquellos que eligen vivir en paz y hacer campaña por la paz y la armonía entre las personas.

En la Biblia, la palabra “pacificador” puede ser traducida como “fabricante de todo”. La pacificación se describe como círculos concéntricos que vienen de un corazón puro, tocando cada parte de la vida de un cristiano. Los pacificadores buscan reconciliar a las personas con Dios y promueven la paz de Dios.

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La paz es un bien comunitario

En la cultura judía, la palabra ‘paz’ se traduce como ‘shalom’, y significa ‘integridad, solidez y bienestar’. El saludo judío usual, “shalom aleichem”, significa “que la paz esté contigo”.

En el Nuevo Testamento, la palabra griega para ‘paz’ es ‘eiréné’, que significa unidad. La paz no es solo la ausencia de conflicto, sino la creación de bienestar comunitario en cada dirección y relación, no solamente una línea recta de paz entre dos personas.

La paz en la Biblia

La paz aparece 329 veces en la Biblia, con la mayor ocurrencia de 30 en el libro de Isaías. La Biblia revela que la paz es un regalo de Dios, pero también nos muestra que podemos ser instrumentos de paz en un mundo necesitado de ella.

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Además, Mateo 5:9 habla de los pacificadores y cómo serán llamados hijos de Dios, enfatizando que la semejanza con el Padre celestial es importante.

La paz verdadera viene de Dios

Es importante recordar que la posición del mundo respecto a la paz es diferente a la visión de paz que tiene el Señor, ya que la humanidad se ha declarado en guerra contra su Creador al rechazar a Dios.

En este sentido, la única manera de salvación es a través de Cristo Jesús. El Evangelio es el mensaje de la paz de Dios para el mundo y los pacificadores comparten este mensaje. La Biblia habla de la naturaleza santa de Dios y que todos los pecadores están bajo Su ira.

Pablo y la paz

En Romanos 12:18, Pablo dice “Haz todo lo que puedas para vivir en paz con todos”. En otras palabras, la pacificación debe ser auténtica y debe involucrar esfuerzos por estar en paz con todos los hombres en la medida en que sea posible, sin dejar que las rupturas en las relaciones desvíen a alguien de ser un pacificador.

Pablo no solo exhorta a los cristianos a buscar la paz con los demás, sino también a ser portadores de la paz de Dios. Él proclama que en Cristo, somos reconciliados con Dios y con los demás, lo que nos permite ser testigos de la paz en un mundo fracturado.

Jesús y la paz

Jesús dijo en Mateo 5:23-24 que la reconciliación con los demás es una obligación previa antes de ofrecer una ofrenda, porque una relación fracturada con los demás es incompatible con una relación correcta con Dios.

Defensa de la verdad y la paz

Hay momentos en los que la defensa de la verdad puede hacer que la paz sea imposible. Jesús lo afirmó en Mateo 10:34-36 cuando dijo que no ha venido a traer paz, sino espada. Esto no significa que Jesús estaba a favor de la violencia, sino que entendió que la verdad puede ser un motivo de discusión y conflicto entre las personas.

A veces, la defensa de la verdad no será popular, pero como cristianos, debemos estar dispuestos a predicar la verdad y defenderla incluso si la paz parece imposible en ese momento. Debemos tener en cuenta que no siempre podemos alcanzar la paz, pero el intento de hacerlo representa nuestra obediencia a Dios.

La paz y la vida cristiana

La paz y la vida cristiana están estrechamente relacionadas. Las enseñanzas de Jesús no son acerca de la salvación por obras, sino acerca de la manifestación de actitudes de humildad, mansedumbre, justicia, misericordia, pureza y pacificación en aquellos que son salvados por gracia a través de la fe.

Los pacificadores representan a Dios y a Cristo en un mundo fracturado. Cuando buscamos la paz y hacemos esfuerzos por ser pacíficos, estamos llegando a la semejanza de Dios y demostrando amor a los demás.

El camino de la paz comienza con la pureza

La Biblia enfatiza la importancia de la pureza antes que la paz. Santiago 3:17 nos dice que la sabiduría que es de lo alto es primeramente pura, después pacífica. La pureza es la clave para tener la mente correcta y el corazón correcto para ser un pacificador verdadero y efectivo.

El rol del cristiano como pacificador

Los cristianos son los únicos pacificadores verdaderos en el mundo, ya que divulgan el mensaje de Dios de paz y verdad duradera. Somos llamados a ser pacificadores en un mundo infestado de violencia y conflicto, de manera que otros puedan ver a Cristo a través de nuestros esfuerzos por promover la paz.

Nuestro compromiso con la pacificación es una demostración tangible de nuestra fe en Dios. Los cristianos deben estar comprometidos con la pacificación no solo en sus relaciones personales, sino en el construir y promover la paz en el mundo.

La paz como un bien mundial

Como persona de fe, Ser un pacificador no es una opción, sino una necesidad. La búsqueda de la paz no solo se limita a las relaciones personales, sino que también debe incluir la paz mundial. La frase “la paz mundial” es un clamor popular unificado, enfatizando la necesidad de paz en todo el mundo.

La paz en un nivel global es vital para la supervivencia de las personas y la naturaleza. Pero, ¿cómo puede lograr un mundo confrontado con guerras y conflictos? ¿Cual es la visión cristiana sobre la paz mundial? ¿Podrían los cristianos ser vehículos para este gran esfuerzo?

La visión cristiana sobre la paz mundial

Es importante observar que la paz mundial no es posible sin la paz con Dios. Los conflictos y los traumas son los síntomas de nuestra relación rota con Dios. La Biblia nos dice que la raíz del mal, la hostilidad y la rebelión contra Dios transforma la paz en hostilidad, y ese es el origen de las luchas internacionales.

La solución a este conflicto global comienza con la reconciliación con Dios. Cuando somos reconciliados con Dios, podemos empezar a trabajar en la construcción de una paz significativa en el mundo.

Premio Nobel de la Paz y Jesús

El mundo está lleno de ideales y hábitos que nos bombardean todos los días, incluyendo el premio Nobel de la Paz, cuyos galardonados son reconocidos por hacer un aporte significativo a la promoción de la paz y la armonía entre los seres humanos. Pero, ¿podría Jesús recibir este premio?

El mensaje de Jesús no es necesariamente de paz, y puede leerse en Mateo 10:34, “No penséis que he venido para traer paz a la tierra, sino espada.” Esto puede ser sorprendente en sí mismo, pero podemos entenderlo mejor si consideramos que Jesús estaba hablando de la división que generaría su mensaje en una sociedad que no estaba dispuesta a escuchar.

El mensaje del evangelio divide familias y naciones, pero es el único mensaje de paz verdadera en el mundo. La búsqueda de la paz no es un proceso de un día, sino que debe ser constante. Los cristianos que son verdaderos pacificadores pueden llevar el mensaje de paz de Dios a todo el mundo, incluyendo los lugares en conflicto.

Conclusión

En resumen, ser un pacificador según la Biblia significa buscar la paz, la armonía y la reconciliación con los demás y con Dios. Este es un camino difícil, pero es el camino que Jesús nos llama a seguir. Los pacificadores no buscan solo vivir en paz, sino hacer campaña por la paz.

La paz es un valor comunitario que viene de Dios. Es importante recordar que la paz no es solo la ausencia de conflicto, sino la creación de bienestar comunitario en cada dirección y relación. Los pacificadores representan a Dios y deben estar comprometidos con la paz no solo en sus relaciones personales, sino en el mundo.

La pacificación es considerada como uno de los temas principales de Mateo 5. La pacificación debe ser auténtica, y los cristianos deben estar dispuestos