Los ‘bolis’ son una golosina muy popular en México y en otros países de América Latina. Se trata de un hielo saborizado que se presenta en una bolsa de plástico sellada, y se consume principalmente en el sureste y en áreas calurosas del país. Además de ser una delicia refrescante para mitigar el calor, también se pueden encontrar en muchos sabores diferentes y se venden en prácticamente cualquier lugar donde haya una nevera o un congelador. Pero, ¿por qué se llaman ‘bolis’? ¿Cuál es su origen y qué hay detrás de su nombre? En este artículo, exploraremos a fondo este tema, analizando algunos datos y curiosidades que seguramente no sabías acerca de los ‘bolis’.
Orígenes de los ‘bolis’
Para entender por qué los ‘bolis’ se llaman así, tenemos que remontarnos a sus orígenes. Aunque no hay una versión oficial sobre su invención, se cree que los ‘bolis’ surgieron en México como una variante de otro postre helado alargado conocido como ‘congelada’. De hecho, en algunas regiones del centro del país, el nombre que se utiliza para referirse a los ‘bolis’ es precisamente ‘congelada’. Sin embargo, en otros lugares como el sur, el bajío y una parte del norte, se les conoce como ‘bolis’.
Por otro lado, en Centroamérica y otras partes de México, los términos más empleados son justamente ‘bolis’ o ‘hielos de sabor’. En cualquier caso, se trata del mismo producto, que consiste básicamente en un líquido saborizado que se coloca en un empaque plástico tubular que mide alrededor de 4 centímetros de diámetro y hasta 30 centímetros de largo. La idea detrás de los ‘bolis’ es consumirlos mientras el hielo se va descongelando para saborear el líquido.
Los ‘bolis’ en México y otros países de América Latina
En México, los ‘bolis’ son una de las golosinas más populares entre niños y adultos, y se venden en diversos establecimientos como tiendas de abarrotes, mercados, tianguis, carritos ambulantes y hasta por internet. Además, se pueden encontrar en una gran variedad de sabores, que van desde los clásicos de frutas como fresa, limón o piña, hasta los más exóticos como sandía, mango, tamarindo o chamoy.
Lo que diferencia a los ‘bolis’ de otros helados o paletas es justamente su presentación en bolsa de plástico, que les da un toque peculiar y los hace más atractivos para quienes buscan una opción refrescante y práctica para calmar la sed. En otras partes de América Latina, como Panamá, El Salvador o Guatemala, los ‘bolis’ también son muy populares y se les conoce con nombres similares, como ‘cuquitos’, ‘gelatinas’, ‘chupichupi’, ‘hielitos’, ‘sabarines’ o ‘congeladas’.
El debate sobre el nombre de los ‘bolis’
A pesar de su popularidad, el nombre de los ‘bolis’ ha sido objeto de debate y polémica en los últimos años. En 2019, la Real Academia de la Lengua Española inició un debate en Twitter al respecto, generando una tendencia en las redes sociales y provocando diversas opiniones y propuestas por parte de los usuarios.
Uno de los argumentos a favor de cambiar el nombre de los ‘bolis’ fue el hecho de que se trata de un término muy coloquial y poco formal, que no se ajusta a los estándares de la lengua española. Por otro lado, algunos usuarios argumentaron que los ‘bolis’ son un producto regional que no necesita una denominación oficial, y que su nombre es parte de su encanto y su identidad.
Denominaciones de los ‘bolis’
Lo cierto es que, más allá de su origen y su nombre, los ‘bolis’ son una golosina muy apreciada en México y otros países de América Latina, que forma parte de la cultura popular y de la vida cotidiana de millones de personas. A pesar de que se les conoce con diversos nombres y denominaciones, su esencia y su sabor son inconfundibles, y han logrado conquistar los paladares de varias generaciones de consumidores.
En México, por ejemplo, los ‘bolis’ son conocidos como ‘congeladas’ en el centro, ‘bolis’ en el sur, el bajío y una parte del norte, y ‘agüitas’ en estado líquido. En algunas regiones, como Monterrey, se les llama ‘sabalitos’ o ‘gelatinas’, mientras que en Veracruz se les conoce como ‘hielitos’. En Quintana Roo, se les llama ‘saborines’, en Puebla y Ciudad de México ‘congeladas’, en Guatemala ‘cuquitos’ o ‘hielos de sabor’, y así sucesivamente.
A pesar de estas diferencias regionales, lo importante es que los ‘bolis’ son una delicia que ha trascendido fronteras y que ha logrado abrirse paso en el mercado internacional, gracias a su sabor, su frescura y su practicidad. Ya sea que los conozcas como ‘bolis’, ‘congeladas’, ‘hielitos’ o ‘cuquitos’, no cabe duda de que son una opción refrescante y económica para combatir el calor y disfrutar de un momento de sabor y diversión.
Los sabores de los ‘bolis’
Además del nombre y la presentación, otro aspecto que hace diferentes a los ‘bolis’ es su variedad de sabores. Como mencionamos antes, hay ‘bolis’ que se preparan a base de leche, otros a base de agua y otros con jugos de frutas naturales. Los que son a base de leche tienen sabores de vainilla, rompope o chocolate, mientras que los elaborados a base de agua suelen contener colorantes y saborizantes artificiales.
Por su parte, los ‘bolis’ de jugos de frutas son los más ricos y refrescantes, y se pueden encontrar en una gran variedad de sabores, desde los más comunes como fresa o limón, hasta los más exóticos como guanábana, tamarindo, jamaica o sandía. En cualquier caso, los ‘bolis’ se elaboran de forma artesanal y se consumen mayormente durante la primavera y el verano en América Latina, como una forma de combatir el calor y refrescarse en cualquier momento del día.
Por qué se llaman ‘bolis’
Finalmente, volvemos a la pregunta inicial: ¿por qué los ‘bolis’ se llaman así? Aunque no hay una respuesta definitiva, se cree que el nombre ‘bolis’ surgió como una forma abreviada de hablar de las ‘congeladas’, que en algunos lugares se denominaban ‘bólitas’. De esta forma, ‘bólitas’ se fue transformando en ‘bolis’, gracias a la simplicidad y la practicidad del lenguaje coloquial.
Aunque pueda parecer una respuesta poco satisfactoria, lo cierto es que el nombre ‘bolis’ se ha convertido en un símbolo de la cultura popular mexicana y latinoamericana, y ha logrado trascender las barreras del idioma y las fronteras geográficas. Más allá de su origen o su denominación oficial, los ‘bolis’ son una experiencia sensorial que nos conecta con nuestras raíces y con nuestras tradiciones, y que nos recuerda la importancia de disfrutar de los pequeños placeres de la vida.
En conclusión
Los ‘bolis’ son una golosina muy popular en México y otros países de América Latina, que se presenta en una bolsa de plástico sellada y contiene un líquido saborizado que se consume principalmente en áreas calurosas del país. Aunque su origen y su nombre tienen diversas versiones, lo importante es que se trata de una opción refrescante y económica para combatir el calor y disfrutar de un tiempo de sabor y diversión. Ya sea que los conozcas como ‘bolis’, ‘congeladas’, ‘hielitos’, ‘cuquitos’ u otra denominación, los ‘bolis’ son una experiencia sensorial que forma parte de nuestra cultura popular y que nos conecta con nuestras raíces y nuestras tradiciones.
